FORMACIÓN GEOLÓGICA

Las Minas de Arditurri se encuentran en las entrañas del macizo de Aiako Harria (Peña de Aia, en castellano), en la localidad guipuzcoana de Oiartzun. Además de ser la formación geológica más antigua de la Comunidad Autónoma Vasca, es singular por su variedad de materiales rocosos y por su espectacular orografía.

Su formación tuvo lugar durante un lento proceso que inició en la era Paleozoica y que aún hoy en día continua. Hace entre 300 y 250 millones de años se fueron sucediendo las etapas geológicas que dieron origen al batolito de Aiako Harria.

Al cristalizar en profundidad, en un proceso que se dilata en el tiempo, el batolito cuenta con importantes filones de una serie de minerales susceptibles de explotación minera: goethita y siderita para la extracción de hierro; galena para la extracción de plomo y plata, así como otros materiales no tan apreciados en minería como fluorita, blenda u ortosa.

Hace unos 300 millones de años, durante la época Paleozóica, una fuerte actividad ígnea tuvo lugar en el interior de la tierra. Una masa enorme de magma fue dando paso, mediante lentos procesos de enfriamiento, a una gran roca de granito que permaneció en el interior de la tierra, hasta que sucesivos movimientos tectónicos fueron haciendo que fluyese hacia la superficie.

Este proceso geológico se basa en la erosión del viento, el agua y otros elementos externos que incidieron en la superficie hasta dar origen a las formas del macizo de Aiako Harria, tal y como lo conocemos en la actualidad.